Muchas personas se sienten, en algún momento, acosadas por una invasión de publicidad no solicitada, tanto en su bandeja de entrada en el correo, como por vía postal o hasta en llamadas telefónicas.
Afortunadamente, en España hay un servicio que regula la publicidad personalizada y puede solventar esta situación. Acompáñanos en Legaling a ver de qué se trata la lista Robinson: el método para evitar el acoso publicitario.
Para poder entender un poco más en detalle de qué se trata este método, vamos a hacer la aclaración de muchos de los términos y ver qué normas y/o leyes se rigen para poder ponerlas en práctica en caso de ser víctimas de acoso.
Nuestra intención es hacerte entender que la liberación de spam es posible. No hace falta que ejecutes acciones emergentes como cambiar el correo, eliminar tu número telefónico actual o cambiar de domicilio. Hay una mejor forma de hacerlo, ajustada a la ley, y eso precisamente es lo que se hace al apuntarse a la lista Robinson.
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¿Qué es la lista Robinson?
La lista Robinson es un servicio que pone en protección los datos de los usuarios que por alguna razón tuvieron contacto con algún tipo de empresa comercial o simplemente jamás han escuchado hablar de esa empresa.
Básicamente, se trata de un servicio de exclusión publicitaria que te hace hermético, por así decirlo, ante los ataques publicitarios sin el debido consentimiento.
Su principal objetivo es evitar que te invadan la privacidad con publicidad o campañas de telemarketing utilizando tus datos para bombardearte con información no solicitada.
Según la agencia española de protección de datos, todas las empresas deberían tener acceso a la lista Robinson y hacer uso de ella para evitar ser sancionado por algún consumidor:
«La Lista Robinson debe ser consultada por quienes vayan a realizar una campaña publicitaria para excluir de la misma a las personas inscritas. Sin embargo, pese a que te hayas inscrito en la Lista Robinson, los comerciantes pueden remitirte publicidad de sus productos o servicios si eres cliente o si les has dado tu consentimiento».
En este sentido, para que una empresa pueda progresar en la actividad económica que ejecuta, debe respetar tanto a sus clientes actuales como a los posibles clientes potenciales y evitar fomentar campañas de publicidad que atenten con la privacidad de los mismos.
Del mismo modo, si un cliente otorga información acerca de sus datos personales y direcciones de contacto, deben tener un límite de la publicidad que se está emitiendo. Si se llega a un acoso publicitario es posible que un consumidor pueda dejar de ser cliente y/o buscar zafarse de forma legal.
¿Cómo entrar en la lista Robinson?
Actualmente, las personas pueden ingresar a la lista Robinson de forma online. Con solo entrar en el siguiente link, puedes sumarte al listado. Sigue las siguientes instrucciones:
- Una vez entres en la página, presiona el botón «Apúntate a lista».
- Luego, eliges la opción «Apuntarme a mí mismo».
- Posteriormente, se abre un formulario virtual que debes rellenar con información personal real.
- ¡Ya estás en el listado!
Si deseas incorporar a otras personas, también puedes hacerlo. Es importante que sepas que cualquier persona mayor de 14 años puede ingresar al listado.
La inscripción se hace efectiva al día siguiente del registro, en teoría. Sin embargo, puede tardar en hacerse plenamente efectiva hasta dos meses después de la afiliación. Si tus datos no están siendo utilizados por ninguna campaña comercial, es posible que el tiempo sea menor.
Baja en la lista Robinson
Curiosamente, del mismo modo que muchas personas quieren ser cliente Robinson, ocurre que algunas, por diversas razones, quieren darse de baja. Seguramente te preguntarás: ¿Es esto posible, puedo darme de baja en la lista Robinson? Pues, te comentamos que sí.
En el momento de la inscripción te solicitan una serie de datos personales y, al mismo tiempo, te dan la posibilidad de seleccionar por qué medio no deseas que te invadan con la publicidad. Es justo ahí cuando haces la activación para que puedas revocar ciertos servicios.
Es decir, actualizas el perfil y es posible que hayas desactivado la publicidad por teléfono pero deseas recibirla por correo postal.
La mayoría de las veces estos cambios ocurren porque hay personas que desean cierto tipo de información porque su trabajo lo requiere o porque desean hacerle seguimiento a los servicios que ofertan ciertas empresas comerciales.
Así mismo, trae muchos beneficios, porque no te sobrecargan de información y no pierdes contacto directo con las compañías. Todo depende de las necesidades de cada consumidor.
Las empresas y la lista Robinson
Al inicio de este post hicimos énfasis en el hecho de que las empresas tienen el deber de consultar la lista Robinson periódicamente, dado que los datos pueden ahorrarle multas y múltiples inconvenientes en caso de una demanda.
Antes de iniciar una campaña de marketing, los anunciantes, los responsables de los ficheros y las entidades prestadoras de servicios comerciales deben revisar la lista Robinson y respetar así la privacidad de los clientes.
Si bien es cierto que el éxito de una campaña depende del bombardeo para llegar a las masas, también es una realidad que se deben respetar ciertas normas de los consumidores.
Todas las empresas que hacen vida en España tienen la obligación de depurar sus bases de datos internas y acoplarlas con las actualizaciones de la lista. No hay que desestimar el hecho de que existen sanciones en contra de aquellas empresas que no consulten previamente.
Como consecuencia de una evasión del listado puede generar un desprestigio de la imagen de la empresa que a la larga puede acarrear un rechazo público, además de una multa considerable.
Nunca hay que dejar de respetar la privacidad de los usuarios. El nuevo Reglamento Europeo de Protección de Datos, expresa claramente que las empresas están obligadas a recabar toda la información necesaria antes de utilizar de forma inequívoca el consentimiento de cualquier usuario de recibir publicidad.
En conclusión, tú decides si quieres recibir información o no. Si te sientes acosado por el bombardeo publicitario, entra a la lista Robinson y decide la publicidad que quieres aceptar.
¿Te ha servido de ayuda este artículo? Recuerda que en Legaling tratamos este y otros temas sobre derecho, normas y sociedades.
